Ciudad de México
Inició un programa de cambio de banquetas en la colonia San Felipe de Jesús, alcaldia Gustavo A. Madero, dejando a un lado la prioridad de rellenar los baches y combatir la seguridad pese a la alta incidencia que se tiene en esta zona.
La colonia que asemeja a una zona de guerra por los baches que tienen sus calles y los montones de tierra sobre las banquetas que obligan a los peatones a caminar por el arroyo vehicular; lo que es peor, los trabajadores de la alcaldía, cobran 300 pesos a los vecinos para retirar basura, tierra y ramas que generan las obras.
Concepción Estévez, representante vecinal de la colonia San Felipe de Jesús, dice que las banquetas se cambiaron hace unos cuatro años, por lo mismo son trabajos innecesarios.
“Ahora están con lo de banquetas, y la verdad si ya estoy desilusionada de aquí de mi alcalde, porque dice que mandó hacer mucho la de la vía, la calle y muchos baches en toda la colonia, no se diga en la avenida Dolores Hidalgo, está terrible y es donde pasan los micros, los camiones”.
En la San Felipe de Jesús hay banquetas destruidas, sin trabajadores, en un horario de las 11 de la mañana a la 14:00 horas, banquetas con piedras y tierra que obligan a los menores de edad a caminar por el arroyo vehicular a la hora de la salida de las escuelas.
Lo que los vecinos han solicitado en las calles de Atotonilco y Calpulalpan, en diversas ocasiones, es la instalación de topes, debido a que es un paso obligado de los alumnos de la escuela primaria “Gertrudis Bocanegra”, algo que no ha tomado en cuenta el propio alcalde que ya decepcionó a sus gobernados.
“Aquí ha habido accidentes y yo he ido hasta con Chigüil, el alcalde, pero no me ha hecho caso, me manda con el de vía pública, me mandas para lo de zona y bacheo, tengo en mis papeles, donde tengo firmas de vecinos para topes aquí y no me han, hecho caso”, informó Concepción Estévez.
Por lo que la solicitud de los baches en calidad de urgente, se debe a los múltiples accidentes que se han tenido en este cruce, incluso que han puesto en peligro a los vecinos que van a curarse de una lesión de huesos o esguinces que se encuentra en la esquina.
Para doña Concepción Estévez, sus vecinos diariamente tienen que torear a los mototaxistas en horario escolar: sin embargo, los viernes está calle se vuelve un autódromo.
“Vénganse los viernes por la noche, a partir de las ocho de la noche, vénganse a ver las carreras de mototaxis que hay aquí, vénganse a ver las carreras, vengan los invito, e invito al alcalde que también que venga echarse sus carreritas”, concluye.
Con información de Excélsior