Ciudad de México
Un sin fin de afectaciones, entre pérdida de pertenencias y enfermedades es lo que cada temporada de lluvias enfrentan vecinos de la colonia colonia Chalma de Guadalupe, en la Alcaldía Gustavo A. Madero, toda vez que las autoridades se han olvidado de hacer sus labores en la limpieza de coladeras y desazolve de drenajes, y nuevamente las lluvias han provocado inundaciones, enfermedades infecciosas entre habitantes de la zona, a lo que se suman otros problemas como bloqueos viales, casas anegadas y pérdidas de pertenencias.
Una de las familias que padecen la temporada de lluvias, es la familia Reynoso que reside en esta colonia que asegura que cada año es lo mismo y los alcaldes siempre llegan prometiendo que arreglarán el problema pero nada pasa. Esta familia ha vivido desde siempre en esta colonia y su casa de una planta se ha inundado siempre que llueve, lo que les ha provocado pérdidas de sus pertenencias.
“Toda una vida de inundaciones, son incontables las veces que hemos sufrido pérdidas, ya que se han echado a perder refrigeradores, sillones, televisiones, la moto de mi hija… nos da miedo cuando llega la temporada de lluvias, porque las inundaciones arrasan con lo que con mucho esfuerzo hemos conseguido”, informó Daniel, padre de esta familia.
Por su parte, Protección Civil en la demarcación refiere que el 50 por ciento de las inundaciones son provocadas por taponamientos en las coladeras y justifica que este problema es por “los malos hábitos de la población de arrojar basura en la calle, esto es lo que provoca que con la lluvia lleguen los encharcamientos y las inundaciones que afectan la salud y las viviendas”.
En varias ocasiones, las inundaciones en Chalma de Guadalupe han llegado a superar en algunas partes más de un metro de altura, lo que ha obligado a vecinos ha interrumpir sus actividades, ya que con estas anegaciones en ocasiones ya no es posible salir de sus hogares.
Casandra vive en la calle Michoacán y este problema, al no poder salir de su domicilio por causa de la inundación provocó su despido laboral.
“Hace casi un año se inundó muy feo en la colonia, el agua me llegaba hasta la cadera; en ese entonces yo trabajaba en un restaurante y le llamé a mi jefa para explicarle la situación, le mandé fotos para que viera que no mentía y que no había manera de salir, pero no me aguantó ni un día, perdí mi trabajo”, compartió Casandra habitante en la calle Michoacán.
Otra de las vecinas, Wendy, quien reside en la calle Jaime Nunó, frente al Reclusorio Norte, señala que se vio en apuros tras ver afectada la salud de su hijo, ya que por causa de una bacteria que se le pegó por el agua estancada por la inundación pensó que su hijo no viviría para contar esta pesadilla.
“Cometí el error de llevar a mi hijo a la escuela un día que se inundó la colonia, se mojó los pies y agarró una bacteria por esta inundación, tuvo fiebre mayor a 38 grados durante casi una semana, tenía salpullido en las piernas que lo mataba de comezón y tenía vómito”.
Mientras que Mariana Nieves,dermatóloga, asegura que el contacto con agua estancada podría derivar en un grave riesgo y desarrollar enfermedades como la dermatitis de contacto, lo que provocaría heridas similares a una quemadura: “Los más vulnerables son los niños, embarazadas y adultos mayores; no solo daña la piel y genera comezón, puede llegar a provocar malaria o fiebre amarilla”.
Sin embargo, no solo los colonos son afectados por las inundaciones. Eduardo es abogado y asiste frecuentemente al Reclusorio Norte por motivos de sus trabajo y explica que en temporada de lluvias se prevé por el tráfico que éstas provocan; “Cuando pinta a que va llover me prevengo hasta con hora y media, ya que de por sí salir de esta zona es complicado por lo reducido de las calles y luego con la lluvia, esto se vuelve una locura”, narra.
Un joven estudiante de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México plantel Cuautepec compartió una queja similar y destacó que los días que llueve su tiempo de regreso a casa se duplica. “Normalmente tardo hora y media en llegar a casa, cuando llueve y se inunda en la parte del reclusorio me tardo hasta tres horas en llegar a casa”.
Las autoridades de Protección Civil exhortan a mantener las calles libres de basura y no arrojar grasas ni sustancias corrosivas al drenaje, y piden depositar la basura en contenedores y no tirar colillas de cigarro.
Con información de la Crónica