Ciudad de México
Ticketmaster negó que el desorden ocurrido con los boletos para el concierto de Bad Bunny, que provocó que cientos de fanáticos no pudieran ingresar al Estadio Azteca, tenga que ver con una sobreventa de boletos por parte de su plataforma.
A través de un comunicado, la empresa señaló que el pasado viernes 9 de diciembre se presentó un número sin precedentes de boletos falsos, comprados fuera de los canales oficiales, para ingresar al show del cantante puertorriqueño.
Según Ticketmaster, la situación habría causado confusión en el personal del control de accesos, además de intermitencia temporal en el sistema de de lectura de boletos, lo que impidió que muchas personas pudieran ingresar al concierto, a pesar de que compraron sus boletos directamente en la plataforma oficial.
“Ticketmaster colabora de manera abierta, amplia y decidida con la investigación conducida por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), a fin de aclarar lo sucedido”, señaló la empresa.
Sostuvo además, que tomó las medidas tecnológicas y logísticas necesarias para que la situación no se repitiera en el concierto del sábado 10 de diciembre y anunció que próximamente darán a conocer nuevas medidas para disminuir considerablemente los espacios a la venta de boletos falsos o duplicados.
“Ticketmaster reitera su disculpa a los fans adquirentes de boletos legítimos comprados en nuestros canales oficiales de venta que no pudieron acceder al concierto del viernes 9 de diciembre”, se lee en el comunicado que se publicó este lunes.
La empresa aseguró que la demanda de los boletos para ver a Bad Bunny fue la más alta en la historia del país, pues 4.5 millones de personas intentaron conseguir una, pero la demanda se limitó a 120 mil personas.